Recipe in English here
Después de publicar la tarta helada de chocolate, toffee y nata algunas personas me han preguntado cómo se hacen las hojas de chocolate. No es nada complicado así que aquí os dejo un tutorial para quien quiera.
Si os animáis a probar podéis
tener una bonita decoración para vuestras tartas o postres con
sólo dedicar un rato a hacerlas. Todo lo que necesitáis es chocolate y unas
hojas que os gusten, a mi estas de la foto con su efecto curvado son las que más me gustan, pero las de rosal también quedan genial. Es conveniente elegir hojas que tengan las nervaduras marcadas para que se transfiera más fácilmente el diseño al chocolate y que no
sean tampoco muy grandes. Aseguraos también de
que no sean tóxicas…
Primero que nada hay que lavar
bien las hojas, para asegurarnos de que estén libres de pesticidas y después
secarlas ya que el chocolate no se pegará si están húmedas.
El siguiente paso es derretir
el chocolate que queramos utilizar. Se
pueden hacer con cualquier tipo de chocolate ya sea blanco, negro etc.. según
el diseño que queramos hacer.
Para derretir el chocolate podemos hacerlo de
dos formas:
-
Al baño
maría, poniendo un cazo dentro de una
olla con agua hirviendo a fuego lento sin que el agua llegue a tocar el culo
del cazo. El chocolate se irá derritiendo sólo por la acción del vapor, así
evitamos que se nos queme.
-
En el microondas pero teniendo mucho cuidado
para no quemarlo: yo lo pongo a media potencia y le voy dando de 30 segundos en
30 segundos y removiéndolo, hasta que esté derretido, unos 90 segundos más o menos me
suele tardar.
Una vez derretido el
chocolate, pintar con él las hojas usando una brocha pequeña de cocina que
deberá estar limpia y seca. Pintarlas por la parte de detrás así quedarán más
marcadas las nervaduras.
Hay que asegurarse de extender
bien el chocolate por toda la hoja llegando hasta los bordes. Cuando hayamos
terminado con la última volver a darle una segunda capa de chocolate a todas,
para asegurarse de que el chocolate es lo suficientemente grueso y que no se
romperá cuando retiremos la hoja (yo de todas formas siempre hago alguna de más por si acaso).
Poner las hojas pintadas sobre
un plato limpio o sobre papel de horno y dejarlas secarse por completo en el frigorífico. Las
hojas serán menos frágiles si el chocolate está bien firme.
El último paso es separar las
hojas del chocolate lentamente, para evitar que se quiebren, empezando por el
tallo y tirando poco a poco hasta despegar toda la hoja. Cuidado de no tocar
mucho las hojas para evitar derretirlas con nuestro calor corporal.
Una vez despegadas todas
guardarlas en la nevera en un recipiente hermético bien tapadas, hasta el momento de usarlas. Procurar que no
se toquen unas con otras ni apilarlas.
Tarta de queso con chocolatinas
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