Recipe in English below
El bizcocho que os traigo hoy tiene un ingrediente muy
poco habitual en repostería pero que os aseguro que después de probarlo he
quedado encantada y os lo recomiendo. La verdad es que nunca antes había hecho
un bizcocho con calabacín pero cuando me lo comentó una amiga me picó la
curiosidad por ver si quedaba tan bueno como el de zanahoria, manzana y canela que publiqué ya hace tiempo en el blog y que
podeís ver aquí.
Y la respuesta es sí,
porque el calabacín que lleva esta receta no le
ha aportado para nada sabor al
bizcocho, lo cual me preocupaba un poco,
sino que el bizcocho sabe a lo que tiene que saber: a chocolate con ese
toque a naranja bastante interesante que le aportan las ralladuras.
Lo que sí ha hecho el calabacín es que quede muy esponjoso y húmedo incluso pasados un
par de días, eso sí el bizcocho sobrante hay que guardarlo bien cubierto para
que no se reseque.
Tenía varias recetas a la vista pero encontré esta en inglés
y fue la que finalmente elegí. Y para
hornearlo como la masa tenía pinta de ser húmeda me decanté por estrenar uno de los moldes de Nordic Ware que me
regalaron por mi cumpleaños que gracias
a la chimenea central del molde ayuda a que se haga por el centro sin problemas. Sinceramente estos moldes suponen una
inversión costosa pero a la larga merecen la pena y se acaban a amortizando,
además tienen unas formas tan bonitas... que da hasta pena cortar los bizcochos!!!
A la receta original le he hecho algunos cambios que os
cuento aquí:
- He sustituido la mantequilla por aceite de girasol pero
pongo la cantidad de mantequilla por si alguien lo prefiere.
- En vez de nueces le he puesto pepitas de chocolate, me
puede la vena chocolatera... y aunque apenas se vean en la foto del corte se notan perfectamente al morder y son una delicia.
- He rebajado el azúcar en 100 g pues la original lleva
400 g entre azúcar moreno y azúcar blanco.
- Y una cucharada de canela que lleva el original no se
la puse porque se me olvidó, pero vamos ha quedado bastante bueno igualmente.
- Tampoco le he puesto la cobertura preparada con azúcar
glas que lleva en la original porque
cuando lo desmoldé lo vi tan bonito que me dio
pena taparlo, además como era un bizcocho para desayunar y mojarlo en
leche tampoco era muy necesario añadirle más calorías.
Es un bizcocho bastante grande y es recomendable usar un
molde de bundt cake u otro que tenga un agujero central para que ayude a que el
bizcocho se haga por el medio.
Si se quiere se puede hacer la mitad de la receta usando un molde más pequeño y reduciendo lógicamente el tiempo de horneado a unos 35-40 minutos o hasta que salga limpia la brocheta cuando lo pinches.