Recipe in English below
Algunas personas me
preguntan si me compensa las horas que dedico al blog y que si no me canso. Es
verdad que cada entrada lleva su trabajo: hay que cocinar el plato, hacer las fotos del paso a paso, y sobre todo
preparar la foto final para que quede bonita porque tengo el defecto de ser muy
perfeccionista y nada me convence... Después hay que redactar el texto con las
explicaciones, seleccionar las fotos que
lo acompañarán, ponerles la marca de agua, etc etc…
Ciertamente el blog nunca me
va a aportar beneficios económicos, que es lo que la mayoría de las veces me
preguntan, pero tampoco me lo aportaría
tirarme dos horas machacándome en el gimnasio o pintando un cuadro…
Este blog es mi afición y me siento feliz cada vez que
alguien me dice que le gusta, y aunque soy
consciente de que algunas personas me lo dicen sólo por cumplir también sé que
hay otras que lo dicen de corazón. Así que
mientras pueda seguiré con él y con vosotros.
Y después de este discursito
vamos con la receta de hoy, la primera de lo que he llamado “Semana temática de la morcilla de Burgos”, durante la cual todas
las recetas van a ser con este producto típico de Burgos que para muchos es desconocido
pero que si tenéis la oportunidad os recomiendo que lo probéis porque merece la
pena.
Esta empanada nos la
inventamos un día sobre la marcha pensando en recetas con morcilla y nos encantó; es ideal para hacerla el día antes y consumirla al siguiente fría, yo
incluso la he hecho alguna vez para llevármela al campo porque cortada en cuadraditos
es ideal para picar y todo el que la prueba repite.