Como la receta de hoy es muy sencillita voy a aprovechar
para hablaros un poco del sitio donde la descubrí: la preciosa ciudad de
Córdoba.
Si alguna vez tenéis la posibilidad os recomiendo que
paséis al menos un fin de semana allí, es una ciudad bastante bonita y fácil de
recorrer, pudiendo completarse la estancia con un tercer día para visitar las ruinas de la cercana Medina
Azahara.
Hay muchísimos rincones para visitar pero no puedo poner
foto de todos ellos que se haría eterna la entrada… así que os pondré foto de
lo más típico y el resto lo tendréis que descubrir por vosotros mismos: los baños
árabes, el puente romano y la Torre de la Calahorra, el Cristo de los
Faroles, la plaza del Potro, el monumento a los enamorados, la sinagoga, los patios, la calleja de las flores, el estrecho
callejón del pañuelo, la encantadora calle Cairuán, el Palacio de los Marqueses
de Viana etc etc…
La Catedral-Mezquita por supuesto es visita obligada. Nosotros teníamos el hotel
justo al lado así que fuimos por la mañana muy temprano y nos dejaron entrar
gratis. De todo lo que vi lo que más me alucinó fue la cúpula del Mihrab y el
bosque de columnas y arcos de herradura policromados.
El Alcázar de los Reyes Cristianos es otra visita
inexcusable, así como sus jardines.
Y otra cosa que hay que hacer es perderse de noche
paseando pos las estrechas calles de la judería para acabar junto a la Mezquita
que de noche te parece como si estuvieras en alguna ciudad remota de las Mil y
una noches.
En cuanto a comer es una ciudad en la que se puede comer
estupendamente, entre otros platos típicos que nos pusieron recuerdo el salmorejo, unas albóndigas
mozárabes, las patatas pelotón y unas berenjenas con miel de caña riquísimas.
Además de la cocina tradicional también hay otros sitios con cartas más
modernas, como uno en el que cenamos cerca de la Plaza de las Tendillas en el
que nos pedimos estas tostas y unas setas a la plancha con alioli, deliciosas.
Y un buen sitio para tomarse algo es también la Plaza de la Corredera, la única plaza mayor cuadrangular de toda Andalucía.
Y como ya me he enrollado un buen rato vamos ahora con la receta de hoy..
Berenjenas con salmorejo
Ingredientes
Un poco de salmorejo (receta aquí)
Huevo duro
Jamón en taquitos o en tiras finas
1 o 2 berenjenas cortadas en rodajas o en bastones
Sal
Pan rallado y 1 huevo batido
Aceite de oliva para freír las berenjenas
* Un amigo cocinero me contó que el truco para que queden bien crujientes las berenjenas y más sabrosas es remojarlas en cerveza, secarlas bien y pasarlas por harina en vez de pan rallado y huevo así que edito la entrada para dar esta otra opción.
Preparación
Corta en rodajas o bastones las berenjenas, las rodajas están bien si las vamos a servir en platos individuales, pero si es una fuente común es más cómodo pinchar los bastones.
Ponlas en agua con sal un buen rato para que suelten el amargor.
Después pásalas por huevo batido y pan rallado.
Fríelas en abundante aceite de oliva y escúrrelas sobre papel de cocina.
Disponlas extendidas en una fuente y échales por encima salmorejo, huevo duro en daditos y jamón.
Y listas para disfrutarlas.
Aceite de oliva para freír las berenjenas
* Un amigo cocinero me contó que el truco para que queden bien crujientes las berenjenas y más sabrosas es remojarlas en cerveza, secarlas bien y pasarlas por harina en vez de pan rallado y huevo así que edito la entrada para dar esta otra opción.
Preparación
Corta en rodajas o bastones las berenjenas, las rodajas están bien si las vamos a servir en platos individuales, pero si es una fuente común es más cómodo pinchar los bastones.
Ponlas en agua con sal un buen rato para que suelten el amargor.
Después pásalas por huevo batido y pan rallado.
Fríelas en abundante aceite de oliva y escúrrelas sobre papel de cocina.
Disponlas extendidas en una fuente y échales por encima salmorejo, huevo duro en daditos y jamón.
Y listas para disfrutarlas.
Simplemente riquísima la receta!! muy sencilla pero a mi me encantan las berenjenas y con salmorejo me imagino como deben estar!! no he estado en Córdoba, pero madre mía en septiembre estaré por Andalucía, quizás me de una vuelta, porque las fotos son increíbles Trinidad, dan ganas de ir!! Un abrazo guapa:)
ResponderEliminarEn septiembre es muy buena fecha para ir, que ya hace un poco menos de calor en teoría..., sí puedes pásate aunque sólo sea un día para visitar la mezquita y el casco histórico :)
EliminarLas berenjenas así te aseguro que están riquísimas al igual que si en vez de salmorejo le ponemos miel de caña.
Un besote linda y que tengas buena semana.
Adoro el salmorejo, las berenjenas ... ¡y Córdoba!
ResponderEliminarYo estuve el pasado mes de octubre y me quedé enamoradísima. La plaza de la Corredera, con sus persianas verdes me enamoró, y sobre todo callejear y descubrir rincones preciosos...
Si es que nuestra tierra es preciosa, visites la ciudad que visites.
¡Besos mil!
Pues sí, muchas veces estamos deseando viajar lejos sin pararnos a pensar que no hemos visto cosas maravillosas que tenemos a dos pasos :)
EliminarUn beso Cuca
Tengo pendiente una visita a Córdoba que seguro no tardará en llegar y ese salmorejo tiene una pinta divina a mi me encanta en verano preparar este plato tan fresquito. Un besote y feliz semana.
ResponderEliminarEspero que puedas ir pronto y disfrutar visitándola, merece la pena :)
EliminarUn beso
Unas de mis vacaciones las pasé el año pasado por Córdoba y me enamoré de lo bonita y lo bien que se come. Me ha encantado esta ruta que has hecho. Tengo que ir otra vez!! Las berenjenas deliciosas me encanta, pronto las haré en casa!!
ResponderEliminarUn besote.
Córdoba y Granada son dos de los sitios en los qe mejor he comido de todos los que he estado, de hecho estoy deseando poder volver por Granada sólo por ir de tapeo xD
EliminarUn beso
Ay las berenjenas con salmorejo... no sé que me gusta más de las dos cosas, si la berenjena rebozada y frita (pecado, pecado, pecado) o el riquísimo salmorejo... uf!
ResponderEliminarPues las dos cosas combinadas ya te puedes imaginar como están :D
EliminarUn besote
Las berenjenas así están deliciosas, de vez en cuando las preparo en casa y aprovecho cunando hago salmorejo de sobra. Córba es uan maravilla de ciudad, de esas con las que te quedan ganas de volver. Un beso y magnífica receta !!! besos
ResponderEliminarSí yo también aprovecho cuando comemos salmorejo de plato principal para guardar un poco y al día siguiente hacer las berenjenas, porque claro cada vez que hago salmorejo hago un kilo de tomates, y si lo tuviera que gastar todo con las berenjenas...
EliminarBesitos Elisa :)
Qué maravillosa ciudad. Yo nunca he probado el salmorejo pero espero hacerlo pronto porque me apetece mucho. El tuyo desde luego se ve delicioso, un saludo.
ResponderEliminarPues anímate, en verano con la calor es un plato que entra muy bien y casi todo el mundo que lo prueba le gusta, así que algo tendrá :)
EliminarBesos
Las berenjenas me encantan y con el salmorejo la verdad es que no las he probado nunca, pero todo se andará Trini, que pintan de maravilla. Preciosa Córdoba, pasear por esas calles de noche es todo un lujazo.
ResponderEliminarBesines
Pues ya verás que ricas están con su poco de salmorejo por encima :)
EliminarBesitos Merchi
Vaya precosidad de fotos acompañan tu rica receta!!besos
ResponderEliminarEs que es una ciudad que tiene rincones muy bellos, es fácil hacer fotos bonitas :)
EliminarBesos preciosa
Que bonita Cordoba, verdad?? Y que rica gastronomía, verdad? El plato que hoy nos traes me parece delicioso, creo que lo podría tomar a diario, jejejeee. Te ha quedado fenomenal!
ResponderEliminarUn abrazo!!
Bueno yo no recomendaría mucho comer fritos a diario, pero de vez en cuando darse un caprichín y comerse estas berenjenas no te diré que no :)
EliminarUn besote
Gracias por las fotos y la receta.
ResponderEliminarMuchísimas gracias Trini :)
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