Tarta de arroz con leche, sin horno

Lo sé, lo sé, últimamente estoy desaparecida. Pero el motivo de mi ausencia ya sabéis que es por algo muy hermoso y al mismo tiempo lo más importante en mi vida hasta el día de hoy.

Las horas, los días y los meses se me escapan casi sin darme cuenta desde que nacieron en Enero de este año mis dos peques, Lara y Álex. Dos bichitos que acaparan toda mi atención, la de su padre, la de su abuela y la de todo aquel que aparezca por casa… Antes de tenerlos no podía ni imaginarme lo que suponía cuidar a un bebé y dos ni digamos. De hecho siempre había oído decir que una vez que tienes un hijo no vuelves a dormir nunca más, lo que no sabía es que dicha afirmación es casi literal.

 El 7 de octubre hicieron 9 meses, el peque ya tiene dos dientecillos abajo, y tanto él como la nena balbucean algunas silabillas sueltas. Ambos  han empezado también a ponerse de pie y a querer echar a  andar con las consiguientes caídas y chichones que no están dando algún que otro susto. En la comida estamos en la etapa de las papillas y es una revolución…  hemos rematado por comprar un lote de baberos de plástico de esos que les cubren casi enteros para no tener que bañarlos cada vez que comen… con eso os lo digo todo. Aunque no sé cuánto tiempo estarán comiendo papillas pues la niña cada vez que nos sentamos a la mesa tiene una curiosidad enorme por todo lo que comemos.

En fin no me pierdo más hablando de este par de trastos y paso con la receta. Hoy os traigo una tarta muuyy sencillita y que si os gusta el arroz con leche estoy segura de que os va a encantar. Prácticamente es como preparar un arroz con leche y añadirle un sobre de cuajada para que aguante la forma.

En mi casa se prepara desde hace años porque  a mi madre le pierde el arroz con leche  y aprovechando que el 7 fue su santo se la preparé una vez más. Tenía fotos de otra vez que la preparé así que he aprovechado y os he puesto fotos de ambas.

Tarta de arroz con leche

Ingredientes (molde desmontable 23 cm)

Base de galleta

200 g de galletas tipo Digestive, trituradas

100 g de mantequilla sin sal, levemente derretida en el microondas

½ cucharadita de canela molida para realzar el sabor a arroz con leche

Relleno

1500 ml de leche entera (litro y medio), yo sin lactosa

200 g arroz redondo

175 g de azúcar de mesa 

2 palos de canela

3 clavos de olor

2 o 3 pieles de limón

1 sobre de cuajada en polvo Royal, sabor lácteo

Canela para decorar con plantillas

Preparación

Esta tarta hay que prepararla con al menos un día de antelación pues necesita una noche de reposo en el frigorífico para que se cuaje bien y el sabor se asiente. De hecho está más rica cuando lleva dos días hecha.

Base

Forra un molde  desmontable de 23 cm con papel de horno.

Tritura  las galletas en la picadora o en su defecto mételas en una bolsa limpia y pásales por encima un rodillo o algo duro para que queden molidas.

Añádeles la mantequilla levemente fundida en el microondas y la cucharadita canela.

Mezcla bien hasta que quede todo integrado y extiende en la base del molde  la mezcla resultante hasta cubrirla totalmente.

Puedes ayudarte con el dorso de una cuchara para que quede bien prensada y lisa.

Métela en el frigorífico para que se endurezca mientras preparas el relleno.

Preparación del relleno

En una olla alta para poder luego triturar en ella misma el arroz con leche pon a calentar a fuego medio toda la leche con los dos palos de canela, la corteza del limón y los clavos de olor.

Cuando empiece a hervir añade el arroz y deja a fuego medio removiendo de vez en cuando hasta que el arroz esté tierno (unos 40 minutos).

Una vez listo el arroz  retira de la olla los palos de canela, los clavos y la cáscara de limón y añade el azúcar y la cuajada. Remueve bien para que se mezcle todo y  dale dos o tres minutillos más.

Quita la olla del fuego  y tritura el arroz con leche con la batidora hasta que quede una especie de crema.

Vierte la crema resultante sobre la base de galleta y déjala enfriar sobre la encimera de la cocina.

 Una vez fría la tarta tápala con film transparente y métela en el frigorífico hasta el día siguiente.

Para desmoldarla sin problemas yo la metí antes de hacerlo una media hora en el congelador.

Pasado ese tiempo la saqué, la desmoldé y reitre el papel de horno de la base.

Coloqué la tarta en el plato de servir y con una plantilla y canela la decoré un poco.