Zebra bundt cake fallido o como la cebra se convirtió en mármol

 

Recipe adapted from Baker Royal

Normalmente en mi casa a estas alturas de año, mediados ya de junio, lo que se suele preparar son helados y tartas de queso bien fresquitas, nada de jugarse la vida encendiendo el horno para hacer un bizcocho… pero llevamos una semana de nublados y viento que más parece esto febrero que junio así que el viernes al final me animé a preparar uno para disfrutarlo en los desayunos del fin de semana. Tras dudar entre varios acabé haciendo éste que llevaba bastante tiempo en mi carpeta de pendientes.

 

Cuántas recetas habré hecho con la promesa de que iba a ser una maravilla para después acabar llevándome una pequeña decepción, vamos que es un poco como la vida misma… que se va aprendiendo a base de probar y arriesgar y no siempre salen las cosas como esperábamos. 

Y eso es lo que me ha pasado con este bizcocho:  es un bizcocho bueno sin más,  de esos perfectos para mojar en leche en el desayuno, y que está mucho mejor cuando lleva dos o tres días hecho, pero no esperéis encontrarle un sabor diferente  (para eso os recomendaría el de Baileys con café o el de mandarinas con pepitas de chocolate). Viendo sus ingredientes ya se ve venir que es un bizcocho normal: harina, azúcar, huevos y aceite… entonces os preguntaréis porqué lo hice… y fue porque lo bello a veces me pierde y este bizcocho me pareció bonito o al menos lo habría sido si me hubiese salido bien el cebreado… pero no lo ha hecho y  me ha salido  más bien un marmolado como podéis ver en la foto inferior. Me  tocará repetirlo más adelante para pulir la técnica, qué le vamos a hacer.

Zebra Bundt cake

Ingredientes (Molde bundt cake 10 cups – capacidad 2 litros y medio)

375 g harina  

5 huevos L a temperatura ambiente

230 g o 250 ml  aceite de oliva suave o de girasol * o 340 g mantequilla sin sal, derretida

450 g azúcar  (500 g en la original)

1 yogur griego natural

60 g de cacao puro sin azúcar Valor

6 cucharadas de agua (90 ml)

1 y ½ cucharaditas de extracto de vainilla

2 sobres de gasificantes de cada color (o 2 cucharaditas de levadura en la original)

½ cucharadita sal

Cobertura

100 g de chocolate

100 g de nata

* En la receta original va con mantequilla pero leí en los comentarios que varias personas se quejaban de que el bizcocho les había quedado muy seco así que la sustituí por aceite de girasol que siempre queda más jugoso. Para sustituir mantequilla por aceite se usa la proporción de 2/3 de aceite, vamos que para sustituir 300 g de mantequilla, echamos 200 g de aceite.

También cambié la leche por un yogur griego.

Y sustituí las 2 cucharaditas de levadura por dos sobres de gasificantes de cada color, ya que hacen que quede más esponjoso el bizcocho.

La cobertura original la sustituí por menos cantidad ya que me parecía una pasada, he rebajado de 160 g a 100 g de cada cosa.

En la foto falta el extracto de vainilla que se me olvidó ponerlo con los demás ingredientes.

Preparación

Prepara el molde que vayas a utilizar, con spray o mantequilla y harina.

Prepara todos los ingredientes.

Tamiza la harina y mézclala con la sal y los gasificantes (o levadura en su caso)

En un tazón pon el cacao con los 90 ml de agua (como medio vaso corto de agua) y añade 100 g del azúcar. Mezcla todo bien hasta que se integre. Reserva.

El resto del azúcar bátelo en una fuente grande junto con el aceite.

Añade el extracto de vainilla y vuelve a batir.

A continuación ve añadiendo los huevos de uno en uno, no añadiendo el siguiente hasta que el anterior esté totalmente batido.

Bate la mezcla resultante hasta que esté bien esponjosa.

A continuación añade por este orden y batiendo a una velocidad baja:

1/3 de la harina

½ yogur griego

1/3 de la harina

½ yogur griego

1/3 harina

Pon a precalentar el horno a 180 ºC, calor arriba y abajo.

De la mezcla resultante separa  dos tazas y mézclala con el cacao disuelto en agua hasta que quede totalmente integrada.

Con ayuda de una cuchara de helado ve poniendo dos cucharadas de la mezcla sin cacao y encima una de la de cacao, alternando las dos mezclas que se irán  expandiendo por todo el molde, pero sin mezclarse.

Cuando termines ambas mezclas dale unos golpecitos suaves al molde contra la encimera para eliminar posibles burbujas de aire.

Mételo en el horno precalentado a 180ºC durante 55-60 minutos o hasta que salga limpia una brocheta al pincharlo. Cuidado de no pasarse de horneado o quedará seco.

Como mi horno no tiene ventilador yo cuando lleva media hora giro el molde para que quede delante la parte de detrás y se haga por igual por todas partes. Nunca abras el horno antes de que lleve 20 minutos.

Sácalo del horno una vez listo y déjalo enfriar en el molde antes de intentar desmoldarlo, para evitar que se rompa. Yo lo suelo dejar una media hora mínimo.

Preparación de la cobertura

Calienta en el microondas o en un cazo la nata y añade el chocolate troceado. Remueve hasta que se disuelva por completo el chocolate.

Déjalo enfriar.

Una vez frío el bundt cake desmóldalo y ponlo sobre una rejilla. Vierte por encima la cobertura a cucharadas y deja que se cuaje. Yo lo metí en el frigorífico para poder hacer las fotos pronto.

  

Es un bizcocho bastante grande por lo que recomiendo guardarlo en la nevera bien tapado o cortarlo en trozos y meterlo dentro de un recipiente hermético.

 Está mucho mejor cuando lleva ya un par de días hecho pero claro siempre que lo conservemos bien.

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