Masa al pimentón para empanada casera

Aquí os presento mi primera empanada con masa casera!!!  Tengo que mejorar bastante el darle forma para que me quede más bonita, que me ha quedado un poco vaya… pero de comer, que en el fondo es lo importante,  si os aseguro que quedó buenísima.

De habitual suelo preparar las “empanadas” con hojaldre fresco del Lidl, por mayor comodidad y rapidez, pero reconozco que no tiene nada que ver una empanada de masa casera con una de hojaldre, están buenas ambas pero saben diferentes.

Sinceramente creo que a partir de ahora me va a tocar amasar a mano igual que me pasó con las pizzas… una vez que pruebas a hacer la masa casera ya no quieres otra.

Y es que he quedado encantada con esta masa!!! La receta la encontré en un libro de cocina tradicional española de mi madre y me ha dado un resultado muy bueno.

Lo que más me ha gustado ha sido ese toque de pimentón que lleva, le puse un poquito de pimentón de la Vera que compré hace poco en mi visita a Trujillo, me traje una lata de cada variedad... y fue una gozada para el olfato mientras amasaba, de hecho cuando la dejé reposando aún permanecía el olor por toda la cocina pese a estar bien tapada.

Aquí podéis leer la receta del relleno de esta empanada de atún, por ahora os dejo cómo hacer la masa.

Masa casera al pimentón para empanada de atún

Ingredientes (Para una empanada de 25 x 40 cm si os gusta la masa del grosor que se ve en las fotos, pero admite estirarla más)

500 g de harina de fuerza

25 g de levadura de panadero fresca o prensada (esa que viene en un paquetito con dos cuadraditos de la marca Levital)

200 ml de agua templada, no caliente que mataría a la levadura

50 ml de vino blanco, a temperatura ambiente

50 g de aceite de oliva virgen extra

10 g de sal

1 cucharada de pimentón dulce  (7 g)

Preparación

Primero que nada advertir que hay que prepararla con tiempo pues la masa tiene que levar una vez amasada y eso puede llevar hasta dos horas.

Templa en el microondas el agua, unos 35 º,  y disuelve en ella la levadura bien desmenuzada, ten cuidado de no poner demasiado caliente el agua porque matarías a la levadura.

En una fuente amplia pon la harina, forma un volcán dejando un hueco en el centro, añade ahí el pimentón y  el agua con la levadura disuelta.

Mezcla todo bien.

Añade entonces el aceite de oliva, el vino y la sal, ésta siempre se añade al final para evitar que entre en contacto directo con la levadura.

Ahora si no tienes amasadora (En kitchenAid se pondría a amasar con el gancho a velocidad 2) es cuando te toca pringarte las manitas como yo. Coloca un poco de harina sobre la encimera de la cocina y comienza a trabajar la masa con ambas manos.

Yo suelo amasarla unos diez minutos para que quede lisa cuando formo la bola.

Suelo ir dándole forma de bola, luego la estiro, la golpeo contra la encimera, le vuelvo a dar forma de bola y así hasta que la masa se ve elástica y lisa.

La prueba para saber si está ya bien amasada es tomar un pellizco de la misma entre dos dedos y con movimientos circulares estirarla; si no se rompe es que ya está bien.

Una vez bien amasada coloca la masa en forma de bola en la misma fuente y tápala bien con un paño húmedo. Hay que dejarla reposar hasta que duplique su tamaño (igual que la masa de las pizzas), en caso de que no veas que sube necesitarás ponerla cerca de alguna fuente de calor para que el calor ayude a la levadura a crecer (por ejemplo puedes meterlas en el horno a unos 50 ºC).

 Una vez que haya duplicado su tamaño, lo que puede llevar de una a dos horas, vuelve a amasarla.

Separa la masa en dos bolas, una más grande que usaremos para la base y otra más pequeña que será la tapa.

Estira cada una sobre la encimera, previamente enharinada,  con el rodillo hasta darle la forma deseada y que quede finita.

Pon la más grande sobre la bandeja del horno, previamente forrada con papel de hornear, y extiende encima el relleno dejando unos centímetros libres hasta el borde.

Cubre con el otro trozo de masa y cierra bien los bordes, asegurándote de que quedan bien sellados (yo uso un tenedor).

Píntala con huevo batido y hornea a 180ºC durante unos 20 minutos o  el tiempo necesario para que esté bien dorada. Y a disfrutarla!

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