Recetas de pestiños como pasa con todas las recetas
tradicionales cada familia tiene la suya, existiendo diferentes versiones en
cuanto a los ingredientes, la forma y hasta la fecha en que se comen.
Con esta entrada simplemente quiero dejar constancia en
el blog de la nuestra para que no se pierda, pues según mi madre es cómo los
hacía mi abuela Rosario y es por ello que quiero conservarla a modo de recuerdo
de la misma.
Es un dulce muy típico de la Semana Santa en Sevilla al
igual que las torrijas, y es por ello que me hubiera gustado subirla con más
antelación pero entre una cosa y otra no pude hacerlos hasta el fin de semana
pasado, en fin más vale tarde que nunca…
Y aprovecho para despedirme de vosotros hasta después de
Semana Santa, que me voy a tomar un pequeño descanso del blog. A la vuelta
pasaré lista así que no se me escape nadie!!!
Pestiños caseros de almendra de mi abuela
Ingredientes
1 kg harina de repostería
50 g matalahúva o anís en grano
50 g ajonjolí
50 g canela molida
125 g de almendras crudas peladas y sin sal
1/2 cucharadita de clavo molido
1 huevo L
Ralladura de 1 limón
Zumo de una naranja dulce
1 sobre de levadura Royal (se le pueden echar 2 si se quiere
que suban más al freírlos)
1 vaso y medio de aceite de oliva suave (300 ml)
La mitad de vino blanco que de aceite (150 ml)
Media copa de anís o aguardiente dulce (100 ml)
¼ de vaso de agua con una pizca de sal (salmuera)
Miel para enmelar, mezclada con un poco de agua. (3/4
miel y ¼ agua)
Aceite de oliva para freír
1 cáscara de naranja
He puesto las cantidades para un kilo de harina porque en
mi casa siempre se hacen un kilo o dos, se fríen y los guardamos en una olla grande, donde
aguantan bastante tiempo, y de ahí los vamos cogiendo y bañando en miel según
los vayamos gastando.
Con estas cantidades me salieron unos 150 pestiños
pequeños, dividiendo la masa en bolitas de unos 14 g (las fui pesando) para que
saliesen todos de igual tamaño más o menos. Si queréis menos pues es cuestión
de dividir las cantidades en proporción.
Preparación
Con bastante antelación para que le dé tiempo a enfriarse
pon a calentar un litro de aceite de oliva con una cáscara de naranja, para que
le quite el amargor. Una vez bien frita la cáscara retira del fuego la sartén y
deja que se enfríe el aceite. De este aceite tomaremos una vez que esté bien
frío los 300 ml que necesitamos para hacer la masa de los pestiños y el resto
lo usaremos para freírlos.
En una sartén tuesta primero la matalahúva a fuego lento
con cuidado de que no se queme.
Después tuesta el ajonjolí, teniendo la precaución de
taparlo para que no salte por toda la cocina al calentarse.
Finalmente tuesta las almendras.
Lo siguiente es moler con un molinillo de café estos
ingredientes. Mis abuelas lo hacían con una machacadera y un lebrillo, pero si
nos podemos ahorrar trabajo con el molinillo mejor.
En un lebrillo de barro o fuente en su defecto pon la
harina formando un volcán y añade:
La levadura
Las almendras, el ajonjolí y la matalahúva bien molidos,
el clavo y la canela. Remueve para mezclar todo bien con la harina.
Vuelve a formar un volcán y añade los líquidos:
El agua con sal
El zumo de naranja
El anís
El vino blanco
El huevo batido
El aceite
Y finalmente las ralladuras de limón.
Remueve para mezclar todo bien y toca empezar a amasar a
mano, hasta que la masa quede totalmente ligada y no se pegue ni a la encimera
ni a las manos. Como en la fuente es imposible de amasar yo lo que hago es que
echo la masa a un barreño de plástico que uso exclusivamente para estas cosas y
ahí ya lo voy amasando y cuando está
bastante ligada la masa ya me paso a la encimera de granito de la cocina
para darle bien de golpes (se libera una de estrés que no veas). Como tenía ayudante aproveché y lo dejé que acabara de amasar él (no es que me saliera vello en los brazos de repente...)
Si mientras amasas notas que necesita más aceite se puede
añadir pero siempre añadiendo la mitad de vino blanco que de aceite añadas.
Si te pasas de aceite puedes ir añadiendo harina poco a
poco según veas que pide la masa.
Una vez bien amasada dale forma a un pestiño y prueba a
freírlo. Si se desbarata es que la masa necesita más aceite, y habría que
añadírselo (junto con la mitad del vino blanco)
y volver a amasar un rato.
Si el pestiño sale bien
forma una bola con la masa y déjala
reposar unas 3 horas bien tapada con un paño.
Pasado el tiempo de reposo hay que darle forma a los
pestiños. En mi casa siempre se le ha dado esta forma, no es muy bonita pero
como son caseros no queremos que parezcan de confitería.
Como tenía de
ayudante a mi novio lo puse a hacer las bolitas como se ven en la foto y yo me
puse a darle forma con el rodillo. A mí personalmente me gusta hacerlos muy
pequeños, casi de un bocado, y dejarlos muy finos, se hinchan menos al freírlos
y quedan más aplastados pero es como se hacen en mi casa y saben diferentes a
si se hacen con más masa. Eso ya es cuestión de gustos y que cada cual pruebe
cómo le gustan más.
Es importante cerrarlos bien para que no se abran al
freírlos, apretando bien con los dedos el cierre, siempre con los dedos dentro del pestiño para que no se pegue. Según los vamos haciendo los vamos colocando en bandejas para luego freírlos.
Normalmente cuando llevamos más de la mitad de la masa gastada empezamos a freírlos para ir vaciando las bandejas para los nuevos pestiños.
Para freírlos en mi casa usamos la freidora por
comodidad, ponemos bastante aceite a calentar y freímos una cáscara de naranja
en él. Después vamos friendo los pestiños por tandas.
A la hora de echarlos hay que cogerlos metiendo el dedo
por dentro para dejarlos huecos y que se frían bien.
Una vez fritos todos en mi casa se bañan en miel unos
pocos y el resto se guardan en una olla para bañarlos más adelante según vayan
gastándose. Así aguantan bastante tiempo, además no es conveniente enmelarlos todos porque cuando pasan unos días la miel como que se ha perdido del pestiño... es mejor enmelar unos pocos y comérselos.
Para darles el baño de miel ponemos a calentar la miel en un cazo con un
poco de agua y cuando vaya a romper a hervir se van bañando los pestiños. Meter
y sacar prácticamente para que no se remojen demasiado y se rompan.
Se escurren con una espumadera de la miel y se echan en
la fuente donde los vayamos a servir o guardar.
Y listos para disfrutarlos!
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Exquisitos!!!!! Seguro que en tu cocina se respiraba un aroma delicioso a matalahúva y almendras tostadas, una receta estupenda de las de antaño que, como bien dices, hay que guardar a buen recaudo.
ResponderEliminarFelices vacaciones y nos vemos a la vuelta.
Besos!!!
Síii me encanta cuando se están tostando y huele toda la casa, vamos que se entera todo el barrio cuando los estás haciendo jajaja
EliminarBesos Jose Manuel :)
Nos lo has explicado tan claro y fácil que no me ha parecido ni tanto trabajo y eso que si que lo tiene, no me he atrevido aún a hacerlos pero ganas me han dado con tu riquísima receta que ha pasado generaciones y que eran de tu guapa abuela. Las dos hemos subido una receta de nuestras abuelas con mucho cariño ¿Verdad?
ResponderEliminarBesos y felices vacaciones de Semana Santa.
Es verdad que tienen bastante trabajo, sobre todo el amasado y más cuando se echa tanta harina, y por supuesto el tener que darles la forma luego... pero una vez al año merece la pena hacerlos porque los comprados pueden ser mejores o peores pero nunca serán los mismos...
EliminarMuchos besos Lola :)
Tienen muy buena pinta!! ya me entro el gusanito de probarlas,
ResponderEliminarseguro que quedan muy ricas, gracias por la receta.
Besos
Quizás cuando te comas el primero no te parezca gran cosa, pero en cuanto se comen dos... son un pocos adictivos :)
EliminarBesos
Guauu que deliciosos estos pestiños, acompañados con los borrachuelos son unos de mis dulces preferidos!! Muy bien explicado pero su trabajo tienen, te han salido perfectos!!
ResponderEliminarBesos y que disfrutes las vacaciones!!
Yo todos los años estoy deseando que lleguen estas fechas para hacerlos :)
EliminarBesos guapa
No conocía este postre!!Seguro que estan de muerte!!Y tu abuela estaría encantada de ver que has puesto una receta suya con tanto amor!!! Los tendré que probar!!! :)
ResponderEliminarUn besote
Por desgracia mi abuela falleció siendo yo pequeña y no he podido aprender mucho de ella, pero al menos algunas recetas suyas me han llegado a través de mi madre y me sirven de recuerdo.
EliminarBesos Maite :)
me gustan mucho lso pestiños! es que es una delicia comerlos, no conocia la receta gracias
ResponderEliminarPor Burgos no los he visto la verdad, no como en el sur que hay mil variedades según la zona :)
EliminarBesos
Qué buenos los pestiños!, no hay que dejar que se pierdan las recetas tradicionales y menos si son de la familia. Felices vacaciones y un beso. azafrandehebra
ResponderEliminarGracias María :)
EliminarMuaks
Un tipico dulce de Semana Santa que siendo receta de la abuela se convierte en exquisito.
ResponderEliminarFelices vacacones
Gracias Lolines :)
EliminarQue gran receta :) y te han quedado preciosos!
ResponderEliminarPorque estaban recién enmelados cuando le hice la foto, luego ya empiezan a perder un poco el brillo porque se van chupando la miel, pero de comer siguen estando igual de ricos :)
EliminarBesos
Parece ser mesmo delicioso mas não conhecia esta sugestão, têm aspecto de ser gulosos.
ResponderEliminarbeijinhos
Beijinhos Sandra :)
EliminarSiempre he querido saber hacerlos que bueno que nos lo enseñes!!besos
ResponderEliminarBesos :)
Eliminarte han quedado estupendos! :) y el paso a paso esta genial!! Me encantan las recetas familiares, siempre tienen un toque especial ;) Disfruta de las vacaciones! bss
ResponderEliminarA mí cámara de fotos es a la que no le parece tan genial el paso a paso jajaja que la pobre la pringo toda :)
EliminarBesos y gracias :)
Tienen una pinta espectacular! éstos son de los que picas en el desayuno, en la merienda, en el postre y hasta te levantas sonámbula!
ResponderEliminarExactamente! Por eso sólo los hacemos una vez al año...
EliminarBesos guapa :)
Que bonita entrada para el recuerdo de tu abuela, me parece preciosa recordarla de esta manera :)
ResponderEliminarUnos pestinos bien ricos, seguro que están deliciosos, me los guardo, que no me quiero quedar sin probarlos!
Un abrazo!
Besotes Raúl :)
EliminarTienen que estar de rechupete, vaya pinta!!! Las recetas de las abuelas, probadas y requeteprobadas son éxito asegurado!!!
ResponderEliminarEstá claro que si se conservan en el tiempo es por algo :)
EliminarBesos Mary
Me ha encantado esta entrada! Los pestiños le salen muy bien a mi suegra!
ResponderEliminarKissitos!!
Sí, cada casa los hace a su manera y de general todos están bastante buenos :)
EliminarUf!! Que delicia!! A mi me encantan y me llevaría un platito de los tuyos, jeje.
ResponderEliminarQue te lo pases genial estos días, descansa y aquí estaremos cuando vuelvas.
Besos.
Gracias :)
EliminarMadre que feliz estoy!!!!! estoy llenando mi carpeta de dulces tradicionales!!!! me encanta los dulces que has traido hoy.
ResponderEliminarBesitos
Youtube: Monica-Saboreando las estrellas
Blog: Saboreando las estrellas
menudo manjar, ole ahí por tu abuela y felicidades por conservar esta estupenda receta , besitos
ResponderEliminarGracias Catalina :)
EliminarBesos